No es ningún secreto que hay poblaciones de personas que se consideran especialmente sanas. Esto se debe principalmente a que llevan una vida bastante aislada y se alimentan únicamente de los alimentos que cultivan, recolectan o cazan ellos mismos. Por ejemplo, la dieta de la nación industrial del Japón también está repleta de ácidos grasos omega-3, vitaminas y sustancias vegetales, gracias a su alimentación predominantemente a base de verduras. Qué nos dicen estos dos hechos: Los alimentos vegetales preparados de forma natural son saludables. Contienen muchos ingredientes importantes que se utilizan como refuerzo en casos de problemas de salud, así como en prevención de diversas enfermedades.
Algunas plantas llevan milenios utilizándose tradicionalmente en medicina. Las experiencias adquiridas durante ese tiempo se pudieron atribuir en parte a sus ingredientes. Por consiguiente, no es de extrañar que también la medicina veterinaria aproveche el poder de las plantas para idear alimentos complementarios especiales en combinación con otros ingredientes que puedan favorecer la salud de las mascotas.
El escaramujo contiene, por ejemplo, vitamina C, que contribuye a la formación de colágeno y beneficia, por lo tanto, la función de los cartílagos y los huesos. El escaramujo es el fruto de varias especies de rosas. Es un fruto compuesto que contiene abundantes nueces pequeñas. Estas nueces levan unos pelillos finos que provocan picores, por lo que muchos las recuerdan de la infancia como polvos picapica. La pulpa se forma a partir del receptáculo carnoso y es agridulce. Contiene carotenoides importantes que dotan al escaramujo, entre otras cosas, de su coloración característica.
Imposible imaginar una cocina saludable sin cúrcuma. Es uno de los ingredientes más importantes de la mezcla de especias del curry. La planta, también llamada cúrcuma o raíz de azafrán, es originaria del sur de Asia. La raíz se asemeja a un tubérculo de jengibre, lo que puede llevar a confusión. Además de su uso como especia, el ingrediente curcumina lleva miles de años empleándose para tratar problemas cutáneos.
En el caso del incienso, a muchos les evoca el ritual de las iglesias católicas y su olor típico al quemarlo. Sin embargo, el incienso indio también lleva largo tiempo utilizándose en medicina ayurvédica para tratar diversos problemas. La planta, también conocida por el nombre Boswellia serrata, crece en Oriente Medio y el norte de África. Su resina contiene aceites esenciales y ácidos boswélicos, cuyos efectos son también positivos para perros y gatos.
Los pueblos originarios del sur de África ya descubrieron hace muchos siglos las propiedades curativas de la garra del diablo. Tradicionalmente, utilizaban el tubérculo radicular para tratar diversas dolencias, como tos, diarrea y estreñimiento, antes de que se convirtiera en uno de los remedios naturales más importantes en Europa a principios del siglo xx. Desde entonces, se utiliza con resultados eficaces para tratar diversos trastornos musculoesqueléticos, así como problemas digestivos y afecciones cardiovasculares.
Estas cuatro plantas coinciden en su efecto beneficioso para la salud, reconocido mucho antes de que la ciencia moderna lo investigara y confirmara. En las siguientes páginas encontrará más información sobre los distintos ingredientes vegetales de nuestros productos.