La glucosamina, perteneciente al grupo de los aminoácidos, es un componente natural del cartílago articular y del líquido sinovial. La glucosamina influye notablemente en el funcionamiento normal de las articulaciones. Es importante para la formación y la nutrición del tejido conectivo, tendones, cartílagos, cápsulas articulares y líquido sinovial.
Un cartílago sano permite que las superficies articulares se deslicen unas sobre otras sin dolor durante los movimientos y favorece la amortiguación de los impactos fuertes. Sin embargo, durante el crecimiento y en animales genéticamente predispuestos, activos y de edad avanzada pueden producirse alteraciones articulares con pérdida de glucosamina.
La condroitina (condroitín sulfato), al igual que la glucosamina, es un componente endógeno del cartílago articular. Proporciona elasticidad y tiene propiedades amortiguadoras. Por si eso fuera poco, aumenta la permeabilidad a los nutrientes, para una nutrición óptima de las articulaciones.
La combinación de glucosamina y condroitina ha demostrado ser especialmente eficaz para favorecer el sistema musculoesquelético y el metabolismo de las articulaciones. En algunos estudios científicos, la suplementación de la dieta con estas sustancias ha demostrado producir resultados positivos.*
*Heisel und Kipshoven (2011): treatment of osteoarthritis with crystalline glucosamine sulfate. Results od the IDEAL-study. MMW Fortschr Med. 153 Suppl 3: 95-100
Iovu et al. (2008): Anti-inflammatory activity of chondroitin sulfate. Osteoarthritis Cartilage. 16 Suppl 3:S14-8.
McCarthy et al. (2007): Randomised double-blind, positive-controlled trialto assess the efficacy of glucosamine/chondroitin sulfate for the treatment of dogs with osteoarthritis. Vet J. 174(1): 54-61.
Bhatal et al. (2017): Glucosamine and chondroitin use in canines for osteoarthritis: A review. Open Vet J. 7(1):36-49